Es para quedarse muerto. El asesinato de una mujer en Roquetas de Mar a manos de su marido que posteriormente se suicidó, ha servido para ver que cuando se puede pillar tajada política, aquí vale todo.
Oyendo y leyendo las declaraciones de distintas dirigentes del PSOE andaluz y del federal, así como al especulador en Bolsa llamado Gaspar Llamazares, cualquiera podría pensar que la ministra de Sanidad Ana Mato es la culpable del crimen.
Todo viene a cuenta de que a la ministra se le ocurrió hablar de violencia en el ámbito familiar en vez de usar la expresión violencia de género o violencia machista.
En primer lugar parece obvio que la ministra utilice la expresión que el PP ha venido defendiendo desde que se comenzó a legislar sobre este asunto, y lo segundo es que en cualquier caso, nadie puede dudar del compromiso de este partido político -y de cualquier otro- en acabar con esta lacra. Sobran desde luego la expresiones amenazantes y apocalípticas usadas desde la izquierda rancia.
Fue el PP el primero en poner a mujeres al frente del Congreso y el Senado (y el único habría que añadir), y el primero en tener presidentas en comunidades autónomas (y el único habría que añadir), tiene una secretaria general (el poder femenino en el organigrama del PSOE está abajo) y ahora el presidente Rajoy con sólo cuatro ministras se ha dotado de una vicepresidenta que acumula más poder del que nunca tuvo alguien en ese cargo.
Es decir, no creo que se pueda dudar de que en el PP se tiene institucionalmente un compromiso por la igualdad, eso sí, de un modo distinto al que tiene el PSOE, nada más. El objetivo es el mismo, los caminos no, y por tanto es comprensible que quien gobierna quiera hacer su propio recorrido en esta guerra que nos implica a todos.
Desde que la Ley de Violencia de Género se aprobó somos muchos quienes exponemos preguntas que no tienen respuesta o cuya respuesta es peregrina.
-¿Porqué en una pareja de mujeres cualquier agresión entre ellas es considerada violencia de género, y si es una pareja de hombres no lo es?
-¿Porqué la agresión de una mujer a otra es "machista" y de un macho contra otro no lo es?
-¿Porqué se trata legalmente de modo distinto si un hombre maltrata a su compañera que si ella se lo hace a él? En ambos casos coacciona, maltrata o mata quien ejercer un poder sobre el otro, quien aprovecha la vulnerabilidad del otro..
-¿Porqué se llama "violencia de género" criminalizando al género masculino? El crimen es responsabilidad de su autor, no de su género, raza, ideología, religión...
Es decir, existen al menos dudas razonables sobre si la terminología políticamente correcta es realmente correcta. Al menos permítase la duda.
Lo realmente triste es que desde que murió esta joven sólo hemos oído ruido y más ruido, pero nada nuevo sobre como acabar con esta lacra a la que por cierto, se le está ganado la batalla. Es muy triste.
1 comentario:
Rafa, como siempre, una de las pocas voces claras de esta tierra y de esta Tierra, sigue asi, que falta haces
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