Harto de estadistas

Si algo nos sobra en Andalucía son estadistas. La última gran estadista andaluza es la presidenta Susana Díaz, que recibe la envenenada herencia de su mentor Pepegriñán, y rápidamente se pone a dar lecciones, eso sí, en Madrid, claro, en Madrid, que Andalucía ya se le ha quedado pequeña.
Pepegriñán hizo lo propio, y nada más ser designado presidente por Manuel Chaves -tan estadista él que no quiso ser presidente y que en cuanto le ofrecieron de nuevo algo en Madrid se largó para allá- presentó una campaña llamada Andalucía 10... encargada eso sí, a una empresa catalana y puesta de largo en un lujoso hotel de la capital del Reino.
Díaz -a la que no llamo Susana porque no sé si ya ha dado permiso como hizo José Antonio para el "llamadmepepe"- se mete a dar lecciones de qué necesita o no Cataluña, si billetes o diálogo o ambas cosas... como si a los catalanes les importara algo lo que piensa la presidenta de Andalucía... vamos, que les importa a ellos lo que diga lo mismo que a nosotros lo que digan ellos de nosotros.
A mi me importa qué financiación tendrá Andalucía, y lo que echo de menos son gobernantes que no miren qué piden otros, ni el cómo ni el por qué, si no que tengan por sí mismos las cosas claras. Ya está bien de escuchar que si los catalanes piden eso o lo otro, nosotros debemos pedir aquello o lo de más allá... necesitamos gobernantes serios y responsables que no actúen por reacción positiva o negativa, si no según sus propios criterios.
Y no es sólo la financiación, lo vimos con la reedición del estatuto de autonomía, un legislatura entera perdida a mayor gloria de ser la cohartada del Estatut para unos y otros.
Ahora le toca también la corrupción, y allá que va la señora Díaz a pedirle a Mariano Rajoy en Madrid, pacto para no tirarse los trastos a la cabeza, y claro, don Mariano dice que eso querría él... pero en esto llega Alfredo P. Rubalcaba y dice que ella en Andalucía haga lo que quiera, pero que él no es tan torpe como para dejar de darle con Bárcenas o la Gürtel al PP todos los días en el Congreso o en la prensa. 
A doña Susana no es que le pesen los ERE, Invercaria, y ahora hasta lo de la UGT, es que lo que le pasa es que necesita salir de Andalucía, que se le queda pequeña, que necesita ser algo más, algo de Despeñaperros para arriba. La cosa es que o quita a Pepegriñán o quita a Rubalcaba... que ella tiene que ser el referente del socialismo patrio... como sea, y quien dice como sea, quiere decir como sea. No olvidemos que se la tienen jurada, porque la andaluza apoyó a la catalana Chacón (que volvió a ser Carmen cuando necesitó el voto de los socialistas andaluces) cuando ésta se enfrentó al ¡diputado por Cádiz! (sí, ese señor es diputado por Cádiz... provincia que no ha visitado más de una vez y por motivos de partido).
No se interprete este análisis como desafecto hacia la presidenta ni mucho menos, porque eso mismo lo han hecho todos sus antecesores, todos los que han podido, claro. Y no pasa sólo en el PSOE, lo hemos visto en el PP con la saga/fuga de Javier Arenas con mejor suerte que Hernández Mancha, y lo hemos visto en IU con Julio Anguita, y también les ha pasado a los líderes del andalucismo... ya vimos a Rojas-Marcos y a Pedro Pacheco... todos ellos, en cuanto pisan la moqueta del Congreso o el Europarlamento les dan unos subidones que no sé... no pasarían un control antidoping, fijo.
Todos dejan atrás esta tierra nuestra, con sus problemas... y buscan hacerse un hueco en el star system de la Carrera de San Jerónimo.
Es por eso que me causa envidia sana que los políticos del nacionalismo catalán o vasco no buscan más que la defensa de los intereses de sus paisanos y sus países... quizá con recetas equivocadas, puede, o quizá cargados de razón, es posible... pero ninguno busca pasar de presidente o consejero a ministro o senador... a Madrid se va a defender Andalucía, no a exhibirse en un casting de liderazgo.
En cualquier caso, me alegro de que al fin vuelva a presidir la Junta alguien nacido y criado en esta tierra, alguien que habla andaluz... algo que no ocurría desde Borbolla, al que liquidaron, después de liquidar a Escuredo... ¿la liquidarán a ella o le dará tiempo a huir a Madrid? 

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