Diario de campaña electoralista (8)


Por la boca mueren el pez y la peza, y eso le pasó a la concejal socialista y aspirante a la reelección Deborah Serón cuando reaccionó ante la decisión del alcalde de Almería, el popular Luis Rogelio Rodríguez, de recepcionar el parque del Andarax.
Indignadísima estaba Serón porque el alcalde había convocado una rueda de prensa para comunicar esta decisión, cuando todos los partidos políticos habían suspendido los actos electorales en solidaridad con las víctimas del terremoto de Lorca. Acusó al primer edil de “electoralismo”.
Por partes. Si es electoralismo “aceptar” el parque, también debe serlo “ofrecerlo”, por tanto en ese caso habría un empate técnico; y digo técnico porque en realidad quien lo ofrece no es ya la Junta de Andalucía si no que al haber dejado en manos de la empresa Egmasa todo lo relativo a él, pues nos encontramos que su responsable es el número tres de la lista del PSOE.
Es más, si alguien sacó el tema en campaña electoral fue el candidato socialista, Juan Carlos Usero, quien dijo que el parque -inaugurado hace ocho meses en unas condiciones lamentables- estaría en situación óptima “dentro de un año”, y se vio corregido por su número tres, Joaquín Jiménez quien afirmó que lo estaría “muy pronto”.
Pero acudiendo al acto concreto hay que destacar que aceptar o no el parque por parte del Ayuntamiento no deja de ser una tarea más en la acción de gobierno municipal.
La Junta podría haber esperado a después de las elecciones, pero no, ha preferido hacerlo antes... ellos sabrá el porqué.
¿Debería haber esperado un día más el alcalde para decir responder si aceptaba o no el parque mientras era acusado de entorpecer la gestión?
Lo que ha pasado es que el PSOE esperaba que el alcalde no aceptara asumir el parque del Andarax, y tenía preparada la batería de acusaciones contra él, hasta el punto de que cuando ha dicho que sí, que el Ayuntamiento se lo queda, que se gastarán lo que haga falta en arreglarlo, pero que se lo quedan tal como está para no seguir demorando la cosa... pues le han llovido las mismas acusaciones que si lo hubiera rechazado. Las mismas.
Y sí, puede que la aceptación del parque haya sido un acto electoralista, pero no lo es menos que ofrecerlo, o valorar políticamente la decisión.
Ese ese el problema de fondo, que el PSOE ha dejado en evidencia que para ellos ofrecer el parque era un acto electoralista.  

1 comentario:

Maria Muñoz dijo...

En campaña electoral no todo vale. Ademas la mayoría de la gente ya sabe a quien votar. Sólo hay una acto que debería valer, es el folleto que explica los objetivos del partido, lo demás sobra.