¿Qué ha hecho él para merecer eso?

Tiene el duduso honor de ser la primera ministra recusada por el Senado, pero no pasa nada, aquí estaban, serviciales como siempre, los socialistas almerienses para lavarle la cara a Magdalena Álvarez. Que el país entero echa pestes de ella, pues no pasa nada, el PSOE de Martín Soler se inventa una distinción y se la entrega a la ministra de Fomento, a la ministra del soterramiento inexistente, a la minista que no ha invertido un solo euro en la provincia de Almería ¡qué más da!

Aquí de lo que se trata es de caer en gracia y a fuer de ello, acabar siendo gracioso. Por eso, a él, a Martín Soler, le llueven los compromisos y los honores. En sólo día dos homenajes. Qué nivel. Claro, los dos de sendos periódicos cuyos lazos de afectividad -dejémoslo ahí- con la Junta de Andalucía son palmarios.

Ante ello la pregunta es, como en el caso de la ex ministra, la misma que se hacía una chica Almodóvar "¿qué ha hecho él para merecer eso?".

Su gestión pública no le acompaña, seamos honestos. Es verdad que en un año igual se puede hacer poco como consejero de Agricultura y Pesca, pero precisamente por eso, no es que merezca ser premiado por ello. Y como consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, hasta el momento se ha limitado a prometer, y en gran medida esas promesas son fruto de su antecesor; en el mejor de los casos, en el poco tiempo que lleva también en este cargo pues tampoco le ha dado tiempo a más.

Pero si miramos al PSOE las cosas no son mucho mejores. Como organización está resquebrajado, y lo único que le mantiene en un "tente-mientras-cobro" es la fuerza que da tener en nómina de la cosa pública a cientos de afiliados. En privado rajan de lo lindo con los periodistas con la intención -hemos de suponerla porque nuestra condición de tales es cualquier cosa menos secreta- de que lo contemos, pero en público jamás osan rechistarle al Ausente.

Y es que es eso también. Soler es presidente del PSOE provincial, un puesto que teóricamente es sólo honorífico, pero cuando se evidencia que ha nombró sucesor y nombró al equipo del sucesor, pues el sucesor no queda muy bien y lo peor es... todo el mundo lo sabe.

Pues si la organización está como está, y ahí podría discutirse, lo indiscutible son los resultados electorales. Los socialistas llevan perdiendo votos hace algo menos de una década, que fue cuando tuvieron su esplendor, y esa caída ha sido con el mismo trío al frente del partido. Ellos han sentado sus reales en los mejores puestos de las listas y de los cargos, como sus fieles, pero mientras, el PSOE se desangra en cada convocatoria electoral... hasta lo del PAL les salió mal.

Siguen en caída libre, cuesta abajo y sin frenos, pero a Martín Soler se le premia.

¿Qué ha hecho él para merecer eso?